Chilenos fueron los únicos representantes de Sudamérica y Centroamérica
El proyecto busca crear raíces que se adapten a la realidad agroclimática del país y fue expuesto en la edición 2024 de la Feria Internacional Macfrut, que contó con más de 56.200 visitantes.
El Centro de Estudios Avanzados en Fruticultura, CEAF, entidad financiada por el Gobierno Regional, presentó en Europa su programa de Mejoramiento Genético de Portainjertos para Carozos. Los representantes chilenos fueron el Dr. Ismael Opazo, investigador líder de la Línea de Agronomía, en compañía del subdirector de Investigaciones de CEAF, el Dr. Mauricio Ortiz, quienes fueron los únicos representantes de Sudamérica y Centroamérica, que participaron en el Simposio Internacional de Portainjertos, donde se presentaron los principales programas de mejoramiento genético en manzanos, perales, frutales de carozos y cítricos.
Para el Gobernador de la Región y presidente del directorio del centro de estudios, Pablo Silva Amaya, “este proyecto trata sobre investigación científica con parámetros internacionales, es decir, en el CEAF, nuestros expertos están indagando metodologías de trabajo tremendamente relevantes para ampliar la subsistencia de árboles frutales en diferentes tipos de suelo”, agregando que “nosotros tenemos un compromiso absoluto en apoyar este tipo de actividades académicas que posicionan a nuestro país en lo más alto de la investigación internacional. Estar presentes en esta feria internacional en Italia, es un tremendo logro y reconocimiento al trabajo del CEAF”.
El objetivo del proyecto de CEAF es crear raíces que se adapten a nuestra realidad edafoclimática, reducir el vigor de los árboles y mejorar su eficiencia productiva para este grupo de frutales.
Sobre esto, el Dr. Ortiz señaló que este “es un programa precursor en el país y de los pocos que está activo a nivel mundial, un camino de largo aliento, por lo que fue un hito exponerlo frente a destacados investigadores, con programas de mejoramiento genético que datan de hace 40 años o más, por ello esperamos que CEAF avance en la consolidación como una institución que provee de conocimientos a nivel regional, nacional e internacional”.
Uno de los aspectos más relevantes en la planificación de una plantación frutal es la selección del portainjerto, ya que éstos componen el sistema radical de los árboles frutales y proporcionan elementos vitales como son el anclaje, la absorción de agua y nutrientes, así como protección frente a diversos patógenos que afectan la sostenibilidad del huerto.
Este proyecto pionero a nivel país, financiado con los recursos basales del Centro I+D+I de la región, provenientes del Gobierno Regional de O’Higgins y de la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID), además, del programa tecnológico financiado por CORFO, Centro Fruticultura Sur, en el marco del Programa Tecnológico “Centro para la investigación e innovación en fruticultura para la zona sur” dio a conocer los principales resultados en la edición 2024 de la Feria Internacional Macfrut.
El certamen que tuvo lugar en Rimini, Italia, contó con la participación de alrededor de 56.200 visitantes, por ello es considerado punto de referencia para la innovación y la sostenibilidad en el sector hortofrutícola y agrícola, puesto que cuenta con una serie de eventos de vanguardia sobre diversos temas como producción y comercio, maquinaria y plantas, biosoluciones, viveros y semillas, entre otros. Además, permite explorar las últimas tendencias y establecer contactos con los líderes mundiales del sector.
Entre los frutales de carozo, la producción de cerezos destaca por su importancia económica de los últimos años y tiene desafíos importantes, puesto que es una variedad que se distribuye entre las regiones de Coquimbo y Aysén, lo que implica una gran diversidad de suelos con diferentes limitaciones. Por esto, a través de los injertos se busca armar un árbol que, por una parte, se adapte bien a las condiciones de suelo de un huerto y que tolere estreses bióticos y abióticos, como enfermedades o sequía, y por otra, injertar sobre esas raíces una variedad que tenga una buena calidad de fruta. Combinando estas dos partes del árbol se busca obtener plantas sanas y con buena producción.
Para aumentar las posibilidades de encontrar resistencias a los principales factores bióticos y abióticos, fue trascendental contar con un banco de germoplasma, con la incorporación de materiales de distinta procedencia, en forma de polen, lo que permitió ampliar las posibilidades de cruzamientos y la generación de portainjertos híbridos interespecíficos, reduciendo los tiempos de importación y espera a floración que implica la importación de plantas.
“Históricamente siempre hemos traído portainjertos desde el extranjero y su comportamiento no siempre es el esperado bajo nuestras condiciones. Por lo tanto, era necesario crear genética propia adaptada a nuestra realidad nacional. En Chile no existen otros programas de esta índole para este grupo de frutales, ni tampoco programas que tengan toda la plataforma de evaluaciones que hemos generado en CEAF para trabajar con portainjertos” expresó el Dr. Opazo.